De la comodidad a la magia

"Tengo una larga historia de dietas, y siempre he fracasado. Al principio comienzo con entusiasmo, y poco a poco lo voy perdiendo, en realidad, conforme van pasando las semanas, me voy permitiendo algunas transgresiones, eso hace que no vea resultados, me aburro y abandono, recuperando todo lo que habia conseguido bajar y mas".

Este es un relato frecuente de oír, palabras más, palabras menos, engloba a un número importante de personas que luchan para controlar su peso recayendo una y otra vez.

Si nos quedaramos en lo anecdótico, podríamos ver lo superficial, que resumido en pocas palabras claves sería:

Como mucho, como poco, hago trampa, siento bronca, como mucho...otra vez!!

A mí me gusta tratar de entender el origen de las cosas, y aunque en oportunidades no lo logro, al menos intento conjeturar . Obviamente no me refiero sólo a las razones de la recaída en el tema de la comida, sino al porque de la repetición de actos, de gestos, de reacciones, de enfermedades, de vínculos, de elecciones, de trabajos, de exítos y fracasos.

Sin dudas existen innumerables modos de comprender las repeticiones, pero hay uno que es simple de enternder para todos:

La Zona de Comodidad, es un área virtual donde cada uno de nosotros nos movemos con cierta confianza, certeza, rutina, tranquilidad...

Todos estos condiemntos dan confort, pero no necesariamente aseguran el exíto y mucho menos la felicidad.

Alguna vez leyendo acerca de esta teoría, vi un gráfico que decía: " Zona de Comodidad", dentro de un círculo, y por fuera de él, la frase "donde lo mágico sucede", y verdaderamente acuerdo por completo con esta descripción simple y profunda.

Todos tenemos acciones repetitivas en nuestra vida, desde caminar por la misma vereda para ir a tomar el subte, o buscar las mismas excusas para volver a fumar luego de haber dejado, o decir "hoy me como la torta y mañana vuelvo a empezar la dieta" sabiendo que no será así, o recaemos en situaciones de pareja similares una y otra vez, o nos saboteamos en nuestro exíto laboral o personal con conductas recurrentes.

Saltar de esta zona de confort donde los limites se encuentran minados por el propio EGO para no atravesarlos, requiere primero de entender y creer que las cosas son así, luego hace falta una gran cuota de valentía y de decisión. Lo nuevo asusta, el exíto abruma, el amor verdadero no abunda, la felicidad y la realización personal son un desafío, sólo hace falta sentir que lo merecemos, que la vida es una aventura y nosotros tenemos el timón, que llegaremos hasta donde nos lo propongamos, y que las posibilidades son infinitas, que crecer es una elección y vivir plenamente una hermosa utopía.

Releo lo escrito y me siento identificado. Cada salto fuera de mi propia zona de comodidad, me ha llevado a un nuevo espacio desconocido, pero cuando me adapté a lo nuevo, superando mis inseguridades y temores, éste se transformó en nuevo espacio de confort, debiendo traspasar sus límites una y otra vez. Tengo esta dura y maravillosa tarea para el resto de mi vida y lo peor...o lo mejor, es que no puedo hacerme el distraído.

Un gran abrazo para todos.

Ricardo Nacach